jueves, 25 de octubre de 2012

Proyecto Ski antiguo en Patagonia

Villa la Angostura es un pueblo en el corazón de los Andes, rodeado de montañas, lagos y bosques. En ese marco, un pequeño grupo de aventureros a principios la década de 1930, se animaron a iniciar y desarrollar las practicar de ski en la región, aprendiendo y mejorando las técnicas, incluso fabricando sus propios esquíes y equipo.


El cerro Dormilón era el que reunía las mejores características para esta práctica: unas excelentes pistas y una temporada de esquí que se extendía hasta Noviembre. Es así como estos hombres de montaña decidieron aventurarse y construir allí un refugio en 1934.

Con el tiempo, las pistas del cerro Dormilón se dejaron de usar por varias razones. Primero porque llegar implicaba cruzar el lago, luego porque se empezaron a preferir pistas con mayores pendientes como Catedral y Cerro Bayo y también porque las técnicas del esquí deportivo fueron cambiando y los equipos evolucionando.

El paso del tiempo fue deteriorando al refugio que finalmente se desmoronó en 1985.  Sin embargo el Dormilón siempre mantuvo el atractivo para los amantes de la montaña que siguieron subiendo hasta la cima caminando en verano y con raquetas o esquíes de montaña en invierno. Estos mismos fueron los que alrededor del año 2004 empezaron a pensar en reconstruir el refugio.

En 2012, setenta y ocho años después, el Club Andino de Villa La Angostura re-inaugura el refugio Dormilón construido con las mismas características que el original.

A partir de éste suceso a Diego Meier, descendiente directo de aquellos pioneros, le surge la pregunta de cómo era y qué se sentía al esquiar en ese tiempo, en las mismas montañas que él lo hace actualmente.

Comienza entonces una investigación, donde recopila fotos, relatos y elementos que le permitirán realizar una excursión de ski como seguramente lo había hecho su abuelo y compañeros en la década del ´30.

Para ello consigue esquíes de la época, la vestimenta, mochila, etc. que lo transportará hacia una aventura única del pasado. Para esta aventura le ayudarán los relatos e historias de su amigo y montañista Werner Diem, un legendario hombre de montaña que todavía desanda los senderos en Villa La Angostura y quién aprendió las técnicas del esquí de uno de los grandes pioneros del andinismo en la región: Otto Meiling.

La excursión de esquí del pasado es un gran día de vivencias y sensaciones que termina con un guiso en el refugio reconstruido mientras se sienta en el mismo lugar en el refugio donde probablemente lo hacía su abuelo 78 años antes, reflexionado sobre todo lo vivido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario